Un medio en Morón Portal de Noticias de la Zona Oeste, Gran Buenos Aires
Uno de los autores del asesinato del heladero Gustavo Ghinch (37), en noviembre de 2009, fue condenado este mediodía a 12 años de prisión, por el Tribunal de Responsabilidad Juvenil 2 de Morón. El otro ya estaba preso. Ambos eran menores al momento del crimen.
El acusado, que ahora 21 años, no estuvo presente en la sala de audiencias al momento de la lectura de la condena por el «homicidio criminis causa». Pero antes se había declarado responsable del hecho, en el marco de un acuerdo entre los abogados de ambas partes.
Por este crimen fue condenado también a 12 años de prisión durante un juicio abreviado otro joven, que para la época del hecho también era menor de edad.
El fiscal que estuvo a cargo de la acusación durante el juicio, Pablo Cabreja, y la familia del heladero Guinch, representada por la abogada María Inés Terrizzano, habían solicitado al tribunal una pena de 12 años de cárcel para el acusado, por lo que el requerimiento coincidió con el pronunciamiento del Tribunal.
Los familiares del dueño de la heladería «Caribe» presenciaron la lectura del veredicto, mientras que en el playón de los tribunales de la calle Almirante Brown y Colón, aguardaban vecinos y amigos junto con integrantes de la Asociación de Familiares de Víctimas (MA.FA.VI).
La hermana de la víctima, Karina Guinch, dijo a Télam, que si bien la condena fue la requerida por la querella, «no era lo que teníamos en mente. Pero bueno, sabemos que peor es nada», expresó, al tiempo que recordó que el condenado por este homicidio deberá ahora afrontar otro juicio por un crimen en La Matanza que comentió luego de haberse profugado de un instituto a la espera de este juicio oral.
«Podría haber resultado cero años sin este arreglo, por haber sido menor el imputado cuando cometió el asesinato», conjeturaron en Mafavi.
El crimen de Guinch fue cometido el 23 de noviembre de 2009, cuando el heladero, que ese mismo día había bautizado a su pequeña hija, realizaba a bordo de su auto una entrega en una casa situada en Monseñor Añeiros y Alessandri, de Morón. Tras dejar el pedido y cuando se disponía a abordar su Peugeot 504, Guinch fue abordado por dos delincuentes armados que acababan de cometer un robo en la zona.
Los delincuentes, que no pudieron escapar de ese hecho a bordo de una moto que habían robado a tres cuadras, intentaron apoderarse del auto del heladero para continuar con su huida.
No obstante, según la pesquisa, Guinch intentó huir en el rodado y los ladrones dispararon varias veces contra el Peugeot. Uno de los proyectiles ingresó por el asiento del conductor y le perforó un riñón, tras lo cual siguió su recorrido y le causó gravísimas lesiones en el estómago.
Según la investigación, Guinch pudo manejar herido hasta su heladería, situada a cinco cuadras de allí, donde fue auxiliado por su mujer y trasladado al hospital de Morón, donde murió una semana después debido a las graves lesiones sufridas.
«Gracias a todos los que acompañaron nuestra lucha», escribió esta tarde Karina en su cuenta de Facebock. «Son 12 años que no nos devuelven a Gustavo ni reparan el dolor por las heridas, pero al menos el saber que fueron condenados ayuda a poder seguir, a sentir que se hizo todo lo posible para que la muerte de mi hermano no fuera en vano.ahora a relajarnos, acompañar a mis papas e intentar comezar a hacer el duelo», explicó.
