El bloque FPV recibió al camporista Rodríguez como un héroe, luego de su detención en Jujuy

Ayer, en la última sesión del año, pero la primera posterior a los incidentes de la semana pasada en el juicio contra Milagro Sala en Jujuy, el bloque del FPV recibió con una ovación al titular del Concejo Deliberante, el camporista Martín Rodríguez, quien había estado algunas horas demorado.

Al grito de «vamos a volver», los concejales K reconocieron la labor de Rodríguez, quien junto a otros legisladores había ido a ponerle el cuerpo a a la condena que recibiría la jefa de la Tupac.

La actuación policial les garantizó cierto rédito político, en medio de las denuncias de corrupción y violencia que enfrenta Sala. Esta semana sumó dos condenas: tres años de prisión en suspenso por el escrache de 2009; y la inhabilitación por tres años para estar al frente de organizaciones por el acampe de 52 días que encabezó el último verano. Ambas acciones fueron contra Gerardo Morales, antes senador nacional y ahora gobernador de Jujuy. Pero son las causas más livianas que tiene la dirigente, que está acusada por defraudación al Estado, entre otras cosas.

Como sea, el Concejo Deliberante de Hurlingham realizó una sesión especial, donde se repudió la represión policial que sufrió la diputada nacional del FPV Mayra Mendoza y el resto de la comitiva.

El oficialismo (que hasta ayer había tenido una tibia, por no decir fría, reacción del intendente, Juan Zabaleta) tuvo otro logro político: Que a excepción del PRO, los bloques se solidarizaron con el presidente del Concejo.

«Estamos orgullosos de haber tenido en Jujuy un representante de todos los vecinos que defendemos los Derechos Humanos», expresó el concejal del sabbatellismo Adrián Eslaiman.

Además, el HCD entregó el reconocimiento de Ciudadano Ilustre a dos vecinos emblemáticos del distrito: Eduardo Pedro Oliva, homenajeado por su aporte al desarrollo del municipio y de su barrio, Villa Club, y a Iris Avellaneda, por su incansable lucha por la memoria, la verdad y la justicia.