El contador Abraham Gak seguirá siendo al menos hasta junio el único Defensor del Pueblo que tuvo Morón. La sesión prevista para esta mañana para designar a su sucesor, tal como se preveía, fracasó y se realizará un nuevo proceso de designación, posiblemente con otros retoques a la ordenanza que creó esa institución en 2008. Todos los bloques se abstuvieron, a excepción de una concejal que postuló una compañera.
En junio el ex rector del Nacional Buenos Aires llegará a los 90 años. Fue electo por primera vez en 2009. Y reelecto en 2014, siempre con los votos del sabbatellismo. Esta semana ya había avisado que no iba a dejar vacante el cargo y pidió buscar alguien con el «perfil» adecuado. Pero el oficialismo no forzó un acuerdo político para asegurarse a nadie. Se necesitaban dos tercios de los votos (16 manos) para elegir un candidato. Se habían presentado once, algunos muy buenos abogados. También hubo dirigentes políticos de la UCR y del PJ.
Finalmente, a las 11 de la mañana de hoy hubo 23 abstenciones de Cambiemos, FR y GEN y un voto a favor. Fue el de Karina Godoy (PJ) quien felicitó a todos los candidatos, pero postuló a Cristina Rodríguez, ex concejal K y referente del Movimiento Evita. El proceso quedó «desierto».
«Lamentamos no poder elegir a ninguno porque es un proceso que no respetó instancias establecidas que son trascendentales, como el proceso que no se llevó adelante en los Consejo Vecinales. El proceso no fue participativo, no fue justo y no tiene consenso», pintó la jefa de bloque de Unidad Ciudadana, Florencia De Luca, al tiempo que desde las redes sociales su partido cuestionaba el proceso. No así a los candidatos.
La primera que le salió al cruce fue Sandra Yametti, del GEN, quien ponderó los cambios a la norma que impulsó Cambiemos el año pasado. «Yo creí en este proceso -dijo- La modificación de la ordenanza salió un unanimidad. Se saneó el proceso y se hizo más genuino. Se bajó la edad y se exigió declaraciones juradas. La ordenanza necesitaba otros ajustes, pero di por sentado que la institución estaba por encima de intereses menores, como confrontar en una elección de candidatos. El proceso era más igualitario. Pero faltó la búsqueda de consensos».
Hasta la semana pasada había intenciones de llegar a un acuerdo. Pero el tema llegó a zona de definición en el arranque del año electoral y con otros asuntos de por medio, como la designación de las autoridades del Concejo, que no fue resuelta en la apertura de sesiones del viernes.
Link sesión:
https://www.youtube.com/watch?v=BNyCDNd1Tkc
Los massitas Domingo Bruno (Tercera Posición) y Jorge Laviuzza lamentaron que no hubiera un mayor consenso. «No pudimos participar de ningún ámbito para llegar a una mayoría», indicó el jefe de bloque del FR.
Para disimular la derrota, que no fue el primero desde que se creó la figura del Defensor, el oficialismo argumentó inconvenientes de fondo.
«En un año electivo hay una necesidad de generar títulos», explicó Emiliano Cattena, en respuesta a los mensajes del kirchnerismo, pero propuso: «En el 90% de las reuniones con los candidatos surgió preocupación por se impide al Defensor desarrollar otra actividad dentro o fuera de Morón (ya sea función pública, comercial o profesional, con excepción de la docencia). Vamos a proponer modificar el artículo 10».
La primera convocatoria para el Defensor (2008) también quedó desierta, aunque en ese momento fue el propio intendente, Martín Sabbatella, quien lo anunció sorpresivamente horas antes de la votación y cuando una dirigente social cercana al oficialismo esta lista par descorchar. En ese momento se alegó la necesidad de poner más transparencia a un proceso que venía corrompido por militantes y amigos.
Y al año siguiente apareció en Gak la solución del problema: Un referente del kirchnerismo, decente, pero a su vez inocuo. Y por eso hoy sigue.
En 2014 el bloque de Nuevo Encuentro le renovó los hábitos, mientras que 4 candidatos que quedaban en el aire intentaban impugnar la elección por «irregularidades» en el proceso que hasta el día de hoy el sabbatellismo pondera. Era obsceno el «aparateo» de los Consejos Vecinales.
Por supuesto no corrieron con mejor suerte después. Este año se presentaba por tercera vez la abogada Natalia Monti, una de las que firmó aquella impugnación. Menos escandalizada, pero de todas formas desilusionada, se descargaba esta mañana en redes sociales por la sesión.
#Defensor del #Pueblo de #Morón Ahora se dieron cuenta que la ordenanza prevé #incompatibilidades Todas las normas que crean cargos de este estilo "deben" establecerlas (art. 4 ley 13834, art. 7 24.284, entre otras) @AZappullaOk @EmilianoCatena @HSabbatella @syametti @jllaviuzza
— Natalia L. Monti💚💚 (@NataliaLMonti) March 7, 2019
Los once candidatos tenían chances de ser electos hoy y no había proscripciones. Tampoco favoritos. Los aspirantes eran: Margarita María Ussher: (psicóloga); Enrique José Ferreira Morais: Abogado, Especialista en Derecho Registral y posee un Posgrado en Mediación; Fabián Héctor López Barbieri: Licenciado en Ciencias Políticas; José Claudio Franciosi: Profesor Nacional de Educación Física; Andrés Fabián Gómez: Periodista. Gestor del automotor; Jorge Héctor Manoni: Pensionado. Fue presidente de la Sociedad de Fomento Primera Junta de Haedo; Raúl César Mirenda: Abogado. Pos grado en Maestría en Defensa Nacional; Natalia Leonor Monti: Abogada, Master oficial de la Unión Europea en Protección Internacional de DDHH. Profesora de Derecho Constitucional; Italo Selser: Abogado. Posee un posgrado de la Carrera de Especialización en Elaboración de Normas Jurídicas y ejerció como Director de la 6ta. Región Provincial en el Patronato de Liberados de la Provincia; Jorge Oscar Salama: Radical y ex municipal; María Cristina Rodríguez: exconcejal (Movimiento Evita-PJ).