Once policías de Hurlingham fueron separados de la fuerza en forma preventiva y son investigados por la Justicia de Morón, luego de que un hombre de 49 años que había sido detenido tras una pelea vecinal falleciera en la celda de la Comisaría de Villa Tesei, el último domingo.
Los policías, pertenecientes a esa Seccional y al Comando de Patrullas, fueron aprehendidos y puestos en libertad tras tomarles declaración.
En un principio estaban imputados en una causa caratulada en forma provisoria como «abandono de persona seguido de muerte», pero que ahora investiga un delito menos severo, como es el de «omisión de auxilio».
La instrucción es realizada por el fiscal Mario Ferrario de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Morón. Y, por los datos que se tienen hasta el momento, el fallecido habría llegado en mal estado y no tendría signos de violencia física. Aunque la investigación recién comienza.
La historia comenzó el domingo último cuando Gustavo Daniel Di Salvo (49 años y domiciliado en Morón) ingresó a una celda de la comisaría de Villa Tesei (Vergara al 2300) visiblemente alterado, supuestamente en estado de ebriedad, acusado de protagonizar un conflicto con una vecina en la calle tras un llamado al 911.
Poco después del mediodía, Di Salvo se desvaneció. Desde la comisaría se llamó a una ambulancia: un médico intentó maniobras de reanimación. El detenido falleció en el acto.
La división Asuntos Internos inició un sumario administrativo en contra de los policías y los separó preventivamente de su cargo. Se les secuestraron sus armas y chalecos antibalas.
Por lo pronto, existen cámaras en el sector de la dependencia donde Di Salvo perdió la vida.
El fiscal Mario Alberto Ferrario dispuso que los 11 policías que estaban demorados tras la muerte de un detenido en la Comisaría Segunda de Hurlingham queden en libertad. Solo estuvieron detenidos 4 horas. Ya fueron desafectados por Asuntos Internos. pic.twitter.com/Iqesc1Yvec
— Fernando Tocho (@nandotocho) March 11, 2019
La autopsia se realizó en el Instituto de Ciencias Forenses de Lomas de Zamora, que depende de la Procuración, al haber policías sospechados del hecho.
Para el fiscal Ferrario, por lo pronto, Di Salvo no murió por un acto de violencia policial, sino por una omisión a la hora de pedir auxilio, una impericia por parte del personal.
En cambio, otras fuentes hablaban de la existencia de una fuerte golpiza.
En paralelo, según comunicó la Defensoría de Casación bonaerense, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dictó el mes pasado una resolución que alcanza a 15 dependencias policiales de la provincia -en la que no figura la 2°de Villa Tesei- «luego de verificar la existencia de riesgo para la vida y la integridad física» de cara a la fuerte sobrepoblación de detenidos en la provincia.
La nueva cautelar de la CIDH se extiende a comisarías de Lomas de Zamora, La Matanza y San Martín.
De acuerdo al registro de torturas que lleva adelante la Defensoría de Casación, la 2° de Villa Tesei cuenta con veinte denuncias por maltratos a detenidos desde el año 2006 hasta 2016.