Mientras que el gobernador, Axel Kicillof, consideró «repugnante» que se judicialice la suspensión de clases presenciales, intendentes, legisladores y hasta concejales de Juntos por el Cambio buscaron activar este lunes una vía judicial, motivados por el rumbo que tomó un amparo presentado en CABA.
Aunque son situación distintas (el gobierno porteño acusa a Nación en vulnerar su autonomía, en cambio el gobernador tiene la potestad de dar o no clases), en la Provincia continuó este lunes la presión para que se reabran las aulas, con actos frente a la Quinta de Olivos, el centro de La Plata y en varias escuelas del Conurbano, incluidas algunas de Ituzaingó y Morón.
El intendente de Vicente López, Jorge Macri, tomó la posta el viernes pasado al resistirse a la resolución que rige en 35 distritos del GBA. Sin embargo, este lunes el juez federal Subrogante de San Martín Oscar Papavero rechazó una cautelar por falta de elementos. Al mismo tiempo que le dio la razón a Rodríguez Larreta: Se consideró competente por ser un asunto de la Justicia ordinaria.
Por ahora no habrá clases en el Conurbano. Kicillof consideró este lunes «repugnante» que se utilice a la Justicia «para perjudicar a los que tienen que ser cuidados» y aseguró que, en cambio, él prefiere «ser antipático» antes que ser «absolutamente irresponsable y hacer política con la vida y la muerte».
No obstante, los intendentes de Vicente López y San Isidro (Gustavo Posse) unificarán su pedido ante la justicia bonaerense. «Ambos pedidos son similares, por eso la idea es aunar ambas presentaciones con el objetivo de lograr el retorno a las aulas en lo inmediato. Si alguna burbuja se contagia voy a hacer todo lo posible para que se cumpla el distanciamiento y los cuidados. Pero la solución no es cerrar las escuelas», aseguró Jorge a La Noticia1.
En la Zona Oeste también hubo movidas. Un grupo de padres se presentó en la puerta del colegio San José de Morón para hacer un abrazo simbólico. En la Escuela Cristiana Evangélica de Ituzaingó también. También se difunde una convocatoria para este martes en la puerta del Sagrado Corazón de Castelar, por dar algunos ejemplos que circularon por las redes sociales y wassap.
En Ituzaingó, el bloque de concejales de JxC tomó la posta y directamente decidieron ir a la Justicia: «Hubo padres que se comunicaron con nosotros porque no entendían cómo era la situación. No preguntaban si íbamos a hacer alguna acción. Y con los abogados nos planteamos llevar un amparo para pedir que en las escuelas de Ituzaingó, similar a la presentación de CABA, Vicente López o San Isidro, los chicos puedan concurrir a clases. Es una forma de proteger sus derechos», explicó el jefe de esa bancada, Gabriel Pozzuto.
La movida es un tanto anárquica, aunque han crecido organizaciones como Padres organizados, que ya tiene su capítulo en Morón. Verónica, una de sus referentes, explicó esta mañana que «desde el último discurso del Presidente se sumaron más de 200 padres» a su grupo, que contempla a todo el viejo partido de Morón, Tres de Febrero, Merlo, San Miguel y San Martín.
«Lamentablemente hay una puja política y los chicos quedan en el medio. No me molesta que los chicos se queden en casa. Van a un colegio privado, tengo PC e internet. El tema es que hay escuelas públicas en donde comen y se refugian, están contenidos. La desigualdad ya estaba dada. En muchas escuelas públicas no había clases en el 90%. De donde sacan que el contagio sale de las escuelas, cuando para absolutamente lo contrario», contó radio Mpquatro.