Un grupo de padres identificado con el oficialismo salió a repudiar el «uso partidario» de la fachada de la escuela primaria 7 de Castelar Norte, luego de la reunión que la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, realizó el lunes pasado en la puerta del establecimiento, junto a dirigentes de su espacio, dueños de micros escolares, psicólogos y padres organizados que piden la presencialidad.
El breve video que la exministro de Seguridad macrista mostraba cómo esa escuela, estaba cerrada con cadenas y candado a una hora (9am) en la que debería estar abierta. Curiosamente, esta mañana la institución abrió sus puertas para recibir un camión con mercadería. Ayer pegaron un cartel con la leyenda «en esta escuela los docentes están trabajando», lo cual no se había puesto en duda durante el acto opositor. Quizás lo hacen, pero desde las casas.
«La Comisión de Xadres Morón REPUDIA ENÉRGICAMENTE el uso político que la Sra. Patricia Bullrich, Concejalxs, Directivxs y Docentxs hicieron en el día de hoy UTILIZANDO la imagen de una de las escuelas de nuestro partido», reza el comunicado difundido desde redes sociales. Y agrega: «Es lamentable que en un momento tan difícil, en el que el mundo entero se encuentra atravesando una pandemia que se ha llevado más de 3,5 millones de vidas, pongan en riesgo y especulen con la salud de niñxs, jóvenes y trabajadorxs de la educación».
«No son momentos de campaña electoral», considera este grupo. «Si quieren militar por Juntos por el Cambio pueden hacerlo en otros ámbitos y no abriéndoles las puertas a quienes fueron responsables del abandono y la destrucción de las escuelas y de la educación pública» sostiene.
Por supuesto, con la lógica del SUTEBA de Roberto Baradel, agrega que «no olvidamos que esta gente carga en sus espaldas los crímenes de Sandra y Rubén», los trabajadores de Moreno muertos por la explosión de una fuga de gas, que la Justicia investigó e imputó al gasista, al interventor de un Consejo Escolar que estaba intervenido por las estafas de las que estaban acusados los consejeros camporistas, que por supuesto también estaban imputados.
También la izquierda salió opinar sobre el asunto, aunque en su caso para criticar a ambos lados de la grieta que sin lugar a dudas ya está en mod de campaña.
Tamara Sotelo (P), docente y delegada de Suteba de Morón declaró que «la docencia no se suma a estas maniobras por una presencialidad para la que no se vuelcan los recursos necesarios».
«Quienes trabajamos todos los días denunciando la precariedad salarial, la falta de conectividad, y las condiciones de pobreza a la que está sometida más de la mitad de la juventud en la provincia no podemos aceptar esta manipulación».
En tanto, Ariel Taccari docente y delegado del Cens 461 de Morón, denunció que «estamos en este conflicto, en donde una nueva resolución en modalidad de adultos afectaría la calidad en la educación y hace peligrar la continuidad de nuestras fuentes laborales». «Creemos que es un recorte en la educación, es por eso que estamos organizando y dando a conocer esta problemática».