El Secretario General de la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECyS), Armando Cavalieri, informó que el gremio consiguió un 9% adicional no remunerativo en noviembre y una suma fija por $4.000 en la revisión paritaria, por lo que el gremio llegó a un 42% en este año al tiempo que se consensuó una nueva evaluación en enero del 2020.
De acuerdo a lo informado tanto por el sindicato como por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), uno de los firmantes, la suma de $4.000 será percibida por los trabajadores durante la segunda quincena del mes de agosto.
Estas negociaciones representan un reajuste de las paritarias suscritas en abril y en la que se pactó un incremento en cuotas: un 8% en mayo, 8% en septiembre, 8% en enero 2022 y 8% en febrero de ese mismo año.
De la reunión llevada a cabo en el Ministerio de Trabajo participaron, además de Comercio y CAME, las autoridades de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Unión de Entidades Comerciales Argentinas (UDECA), Carlos Pérez, titular de Osecac y secretario de Asistencia Social del SEC.
El acuerdo fue calificado por el sindicato como «auspicioso» y que logra «neutralizar la embestida inflacionaria y las oscilaciones de una economía endeble».
Según consignó FAECyS Cavalieri expresó que la consenso se dio por medio de «la vía del diálogo como herramienta superadora y por medio de una discusión madura».
“La aplicación de la cláusula de garantía que hemos puesto sobre la agenda de la discusión se ha erigido, sin dudas, como un mecanismo eficaz para proteger el ingreso de bolsillo de nuestros afiliados”, indicó.
Ámbito había adelantado la semana pasada que el gremialista negociaba a contrarreloj con los empresarios mercantiles para obtener una suba de entre el 8% y 13% extra a lo firmado en abril.
Las dos partes no llegaron a un acuerdo previo como tradicionalmente ocurre antes de que se sienten en la mesa de Trabajo y la audiencia del pasado jueves no fue satisfactoria.
La exigencia de Cavalieri se dio en medio de un contexto en el que otros gremios solicitaron un reajuste paritario producto del índice inflacionario que trepó a un 25,3% acumulado en el primer semestre.
Caso Garbarino
En el mundo empresario dan por descontado que la cadena Garbarino terminará en concurso de acreedores: Cerró sus locales con unos 4.300 empleados.
Para el viernes está programa una marcha en la zona sur. En el interior del país las movilizaciones se suceden a diario. La empresa sólo pagó salarios a través de REPRO en mayo y junio. Por supuesto que montos muy acotados: apenas 22.000 pesos por persona. Desde entonces, la compañía no ha vuelto a cubrir haberes, mucho menos el aguinaldo y sendos bonos acordados en 2020.
Garbarino acumula casi 3.400 cheques rechazados por $4.900 millones, según la Central de Deudores del Banco Central. A eso se suma que se dilata la reactivación de las plantas de Tierra del Fuego, donde hay casi 300 operarios que reclaman el pago de haberes. Casi la totalidad de los 105 locales de la compañía permanecen cerrados en la actualidad, esperando comprador.