Un kinesiólogo fue detenido luego de que las cámaras de seguridad de un centro de rehabilitación de William Morris detectara el abuso sexual a una paciente en estado vegetativo.
El caso ocurrió el 30 de diciembre al mediodía en el centro de rehabilitación San Juan de Dios, que está ubicado sobre la avenida Pedro Díaz al 3.300 de Hurlingham.
El profesional fue detenido y luego quedó en libertad aunque enfrenta un proceso por el cual puede recibir de cuatro a diez años de prisión. Para la Justicia las pruebas son suficientes para llevarlo a juicio y no existen riesgos procesales, aunque interpuso una restricción de acercamiento a la víctima y a su familia.
La denuncia fue radicada por el director de la clínica que accedió a los registros de las cámaras del establecimiento médico y se encontró con el aberrante hecho.
A su vez, la filmación es una de las pruebas fundamentales para el avance de la causa.
La causa quedó a cargo de la fiscal Marisa Monti, de la UFI Nº 5 de Morón, quien solicitó al Juzgado de Garantías Nº 6, interinamente a cargo de la Jueza de Garantías Laura Pinto, el allanamiento en la vivienda del imputado.
La denuncia la realizó el propio director de la clínica, que no solo presentó el video grabado por la cámara sino también otras pruebas relevantes para poder avanzar rápidamente con la causa. En la grabación se puede ver al kinesiólogo abusar de la víctima mientras simulaba realizar su trabajo terapéutico. La joven permanece inconsciente, con traqueostomía y sondas nasogástricas, después de que intentara quitarse la vida de un balazo en la cabeza.