El porno-cementerio: Un padre inició acciones legales contra quienes profanaron la tumba de su hijo y critica al municipio

Desatado el escándalo en las redes sociales por la viralización de un video porno firmado meses atrás en el cementerio de Hurlingham, el padre de un menor, cuyos restos descansan allí desde el 2015, comenzó acciones legales contra quienes considera que «profanaron la tumba» de su hijo; y además lanzó duros cuestionamientos contra el Municipio, tanto por la falta de respuestas como por el estado general de ese espacio.

La polémica explotó en Facebook, cuando un usuario denunció que un video protagonizado por la actriz porno Niquui Salazar fue subido a por lo menos en dos plataformas eróticas: Only Fans y Pornhub. El escenario era nada menos que el cementerio municipal. La prueba más contundente de ello era la imagen de la tumba de Diego Aljanati, el adolescente de Hurlingham que fuera asesinado por un patrullero a la salida de un boliche de Parque Leloir en 2015. El actor porno que a su vez filma la «acción», a plena luz del día, hace las veces de cuidador y toca varias lápidas. Una de las cuales pertenece a Diego. La familia dice que había sido profanada en noviembre último. Y acaba de iniciar acciones legales, con este video como evidencia.

«El año pasado profanaron y robaron cosas. Quizás esta gente se haya llevado cosas. Entonces, hice la denuncia en la UFI 2 de Morón presentando las pruebas. Vamos contra los que hicieron este video. Ellos serán responsables de lo que pasó. Los culpables también son los cuidadores del cementerio. Creo que hubo complicidad. Por eso la responsabilidad también es el municipio. Que los cambien, que los echen, que cuiden un poco mejor», explicó a este medio Cristian Aljanati, padre del joven atropellado por aquel patrullero.

El video fue subido hace por lo menos seis meses atrás a Pornohub, bajo el nombre de usuario de «La morochita». Por ese entonces la gestión de Damián Selci llevaba unos meses: Este año ya habría relevado a las autoridades del cementerio por varias irregularidades. Sin embargo cuando la familia de Diego se presentó en el palacio municipal, no pasó más allá de las «orientadoras» de la puerta, ni recibió una explicación.

Esta fue la última y más insólita denuncia sobre el estado del cementerio de Hurlingham. «Son todos unos chorros hasta en la administración del cementerio. Afanan ala gente que se paga las exhumación y al final no se paga nada se quedan la plata para ellos. Ya no se puede confiar en nadie ahí. Son los cuidadores chorros el director chorro y ahora los empleados chorros es una vergüenza lo que está pasando en el cementerio Parque y encima quería hacer la queja la señora y el director brillo por su ausencia», posteó en abril Soledad, en su cuenta de Facebook, disconforme con cómo se cuidan los nichos y lápidas de los vecinos.