En el Paseo de la Memoria de Hurlingham las secretarías de DDHH de Nación y del Municipio realizaron ayer un acto de señalamiento en homenaje a Rodrigo Corzo, el joven de 19 años asesinado por la policía bonaerense, el 28 de junio de 2003 en el Puente Santa Rosa de la Autopista del Oeste cuando iba en a casa de su novia.
Aquella noche, un móvil policial a cargo del subinspector Cristian Solana y conducido por el sargento Ariel Núñez del Comando de Patrullas de Hurlingham consideraron que el auto de Rodrigo era sospechoso. Comenzaron a perseguirlo hasta que Solana disparó dos veces por la ventanilla del patrullero. Una de las balas atravesó el baúl del auto y se incrustó en la espalda de Rodrigo, que murió en el acto.
En el homenaje se descubrió un cartel con una gran foto de Rodrigo Corzo sonriente y un texto que cuenta cómo fue asesinado y todas las pruebas falsas plantadas por la policía, algo típico en las causas de gatillo fácil.
También estuvieron en el acto a metros de la estación ferroviaria de Hurlingham, Horacio Pietragalla Corti, secretario de Derechos Humanos de la Nación; Cecilia Sáenz, presidenta del Consejo Deliberante de Hurlingham; Matías Moreno, subsecretario de Derechos Humanos de la Provincia; Patricia Danna, directora de Derechos Humanos de Hurlingham y la concejala local Viviana Lodos, entre otros funcionarios.