El bloque del Frente de Todos logró hoy desempatar una votación clave en el Concejo Deliberante de Morón que, de perderla, la hubiera ocasionado un perjuicio fiscal al Departamento Ejecutivo. Es que los bloques del universo de Juntos presentaron un proyecto que derogaba la facultad delegada en el intendente para subir las tasas hasta un 25% en octubre, para retrotraer esos tributos a los valores de septiembre. Un exfuncionario de la gestión anterior, hoy aliado al oficialismo, le volvió a salvar la ropa al oficialismo.
“No voy a escribir con el codo lo que escribí con la mano. Para mí la cláusula gatillo está bien conceptualmente. Lo que tenemos que analizar es si el intendente la aplicó legítimamente o no”, advertía el concejal de Encuentro Federal Cristian Herrera, el martes, en el programa Primer Plano, donde calificó a sus pares de Juntos de buscar «desfinanciar» al gobierno de Lucas Ghi, argumento propio del Frente de Todos.
Hoy, en el debate de la sesión pedida por la oposición, Herrera fue el único concejal en asistir de manera remota, es decir bajo la modalidad postpandemia. El oficialismo se lo habilitó con el empate asegurado y el voto doble de la Presidencia, que ocupa el massista Marcelo González (también con la ayuda de Herrera, quien supo ser subsecretario de Legales en parte de la gestión Tagliaferro y candidato suyo en 2019).
Juntos no pudo imponer su proyecto. En cambio, el FdT consiguió que se gire al Ejecutivo pero con la intención de que vuelva en forma de informe sobre la inflación, la recaudación, el gasto y el ajuste en las tasas. Para el oficialismo, fue del 70% este año. Para JxC acumula «un 107%» si se toma en cuenta el 50% previsto para este año en dos tramos, el 25% de octubre, y el revalúo que se hizo a fin de año sobre la TSG.
Es ni más ni menos que lo que pide la ordenanza fiscal e impositiva para cuando se ejecute la «cláusula gatillo».
“El ajuste debe hacerlo la política. El Estado municipal no puede anular la regla más básica del sentido común, ante una crisis económica fenomenal como la que estamos viviendo, debe moderar el gasto y tener prioridades. Los vecinos no pueden seguir pagando los más de 100 millones en alquiler de escenarios, por ejemplo. Debe existir un compromiso de austeridad y transparencia por parte del Ejecutivo, no se puede seguir golpeando siempre a los mismos”, protestó Analía Zappulla, una de las voces de Juntos.