Rosario y el arte: sitios emblemáticos de esta gran ciudad

Rosario respira arte en cada esquina. Desde sus imponentes museos hasta los murales que transforman medianeras en galerías a cielo abierto, la ciudad santafesina desarrolló una identidad cultural que trasciende fronteras. Quienes estén buscando visitar la hermosa ciudad de Rosario para explorar (en este link podés ver cómo llegar), encuentran una puerta de entrada a experiencias artísticas únicas que combinan historia, vanguardia y expresión popular.
El corazón museístico: tradición que perdura
El Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino marcó un hito desde su inauguración el 7 de diciembre de 1937. Fue el primer proyecto de museo pensado con arquitectura moderna en el país, concretado gracias al mecenazgo de la familia Castagnino. Rosa Tiscornia de Castagnino donó el edificio a la ciudad en memoria de su hijo Juan Bautista, notable coleccionista de principios del siglo XX.
Su colección incluye más de 3.000 obras que incluyen pinturas, esculturas y series de grabados emblemáticos del arte argentino de los siglos XIX y XX, además de valiosas piezas europeas. La construcción estuvo dirigida por el arquitecto Hilarión Hernández Larguía y el ingeniero Juan Manuel Newton, quienes lograron que el espacio se convirtiera rápidamente en un polo artístico de referencia nacional.
Por su parte, el MACRO (Museo de Arte Contemporáneo de Rosario) exhibe una colección de arte contemporáneo que es una importante referencia para quienes deseen conocer el arte argentino. Se inauguró el 16 de noviembre de 2004 con diez pisos: siete destinados a exhibiciones y tres para depósito, administración y servicios.
Espacios que abrazan la memoria y la reflexión
En el casco histórico, frente a la Plaza 25 de Mayo, el Museo de Arte Decorativo Firma y Odilo Estévez conserva la residencia de la familia Estévez Mayor. Donada íntegramente a la Municipalidad con su colección, mantiene en su estructura el mobiliario estilo español de comienzos de español del siglo XVI en adelante.
Datos oficiales indican que la colección fue reunida durante 30 años e incluye platería colonial, tapices, alfombras y luminarias de bronce y cristales.
El Museo de la Memoria se encuentra en el edificio que funcionaba como Comando del II Cuerpo de Ejército. Desde diciembre de 2010 ofrece una sala de muestra permanente con obras de destacados artistas locales, otra de exposiciones temporarias, centro documental, biblioteca especializada con más de 3.500 volúmenes y auditorio para 120 personas. Es miembro de la Coalición Internacional de Sitios de Conciencia y pionero en América Latina en el tratamiento de memorias post-genocidas.
El Monumento a la Bandera: arte, historia y arquitectura
Imposible hablar de arte rosarino sin mencionar el Monumento Histórico Nacional a la Bandera. Inaugurado el 20 de junio de 1957, este emblema urbano se alza donde Manuel Belgrano izó por primera vez la bandera argentina el 27 de febrero de 1812.
Los arquitectos Ángel Guido y Alejandro Bustillo, junto a los escultores Alfredo Bigatti y José Fioravanti, ganaron el concurso nacional de 1940 con el proyecto «Invicta». La construcción comenzó en 1943 y concluyó catorce años después. Revestido en mármol travertino, ocupa 10.000 metros cuadrados y simboliza a la patria como una nave que avanza hacia el futuro.
El monumento consta de tres partes: La Proa (que incluye la Torre de 70 metros con mirador y la Cripta de Belgrano), el Patio Cívico y el Propileo Triunfal. Cada sector alberga esculturas monumentales que representan valores geográficos y espirituales: Océano Atlántico, Río Paraná, Los Andes, La Pampa, y los cuatro puntos cardinales interpretando los horizontes patrios.
Arte urbano: cuando la ciudad se convierte en lienzo
Rosario también despliega su creatividad en las calles. El proyecto «Arte a la Vista – Museo Urbano» exhibe obras de artistas rosarinos reproducidas a escala gigante en las medianeras de los edificios de la ciudad, que queda transformada en una galería de arte abierta.
El «Circuito Messi» representa una iniciativa reciente que combina deporte y arte urbano. Se trata de un recorrido que comienza en la casa natal del futbolista, continúa con murales en la escuela General Las Heras y llega hasta el club Abanderado Grandoli. Las obras incluyen representaciones del triunfo en la Copa del Mundo y la Copa América.
Un circuito que nunca termina
Anualmente en Rosario se realiza la Noche de Museos Abiertos y ejemplifica cómo esta ciudad articula sus espacios culturales. Con entrada libre y gratuita, el evento convoca a 26 museos y espacios, desde el Centro de Expresiones Contemporáneas hasta el Complejo Astronómico Municipal.
Sin dudas, Rosario consolidó una propuesta artística integral donde cada visitante encuentra su propio recorrido. La ciudad ofrece múltiples puertas de entrada a experiencias que permanecen en la memoria mucho después del regreso a casa.
La arquitectura Art Nouveau y Art Decó suma otra capa de belleza urbana, mientras que la costanera del Paraná enmarca todo este patrimonio con paisajes que cambian según la hora del día. Después de todo, Rosario demostró que el arte no necesita límites: puede estar en un museo centenario, en una medianera transformada o en un monumento que dialoga con el río desde hace más de seis décadas.