Morón: El Municipio intervino la Plaza de la Cultura, pero todavía hay polémica por los «manteros»
Finalmente, el gobierno de Lucas Ghi intervino la «Plaza de la Cultura», ubicada entre las Larralde, Salta y Cabildo, en Morón Norte y a los pies de la sede central de la Universidad de Morón, que venía reclamando por su recuperación.
Ayer, el Municipio mostró como se avanzó con la instalación de juegos para chicos, cambiando el aspecto de plaza seca y patio para descanso o eventos que tuvo en un principio. Aunque la obra alejó a la mayoría de los manteros, en el espacio contiguo al edificio educativo, todavía hay vendedores informales en un sector, sobre la calle Salta, como también en buena parte de los alrededores: Tanto de la estación lado norte como la Sur, incluyendo plaza La Roche.
«Como parte de las acciones que se llevan adelante, se están colocando nuevos juegos infantiles por parte de la Fundación del Banco Provincia, plantación de especies nativas, señalización, demarcación de sendas peatonales y cordones, entre otras», destacaron las redes del Municipio y del intendente, asumiendo los cambios del último tiempo.
Es que intervención llega después de la designación de Damián Cardoso como secretario de Seguridad. El exdiputado de Unión Celeste y Blanco se presenta como profesor de la UM, y no tiene los compromisos de sus antecesores. Dicen en la universidad que la venta ambulante se desarrolló con aval de ciertos grupos políticos de UxP.
Mientras, tanto, desde la oposición celebraron con moderado optimismo la obra. «Desde el bloque PRO-Libertad venimos reclamando por medidas, desde el envío de inspectores por habilitaciones hasta la intimación al desalojo. Estamos viendo que comenzaron por el sector frente a la UM; esperemos que continúen por la otra mitad de la plaza y sobre las veredas de Salta (entre Machado y Larralde) donde todavía hay manteros», postearon concejales de Bullrich.
La Plaza de la Cultura fue inaugurada por el intendente Ghi en marzo de 2015, después de reubicar al Cuartel de Bomberos (junto al cementerio), el centro provincial de vías respiratorias y la escuela de Danzas José Neglia en la ex clínica Otharán. Pero, con el tiempo, se convirtió en centro de ventas informales y de personas en situación de calle.
En abril del año pasado, por primera vez, autoridades de la Universidad de Morón hicieron público su malestar por el estado de ese espacio público, que fue concebido con la interacción de la Facultad de Arquitectura pero se convirtió en los últimos años en un espacio de manteros y personas en situación de calle, que llegó incluso hasta la galería del sede central de la UM, en Cabildo al 100, hasta la última reforma, cuando se cerró y reincorporó como salón
El 10 de enero, secretario General de la Casa de Altos Estudios, Pablo Navarro, tuiteaba por última vez sobre el asunto: el «reclamo desde la @uni_moron en resolver el abandono y la ocupación de “La Plaza de la cultura” y devolver a la comunidad, y a los miles de alumnos su utilización, para poder poder transitar seguros también por la noche».