El nuevo mapa político: Dirigentes sindicales se proponen armar una «alternativa peronista» para Morón
Cuatro gremios iniciaron el camino para ser la «alternativa peronista» en Morón, con vistas al tablero político del 2025. Alfonso Martínez, de Gastronómicos; Jorge D’Andrea, de Sanidad; Víctor Hugo Pintos, de Comercio; y Ricardo Gamarra, de Bancarios, se lanzaron a la conformación de este nuevo espacio, con un mirada crítica sobre el Gobierno, pero a su vez diferenciándose del sabbatellismo. Los motiva «la falta de liderazgo en el peronismo» y la certeza de que el intendente, Lucas Ghi, no tiene posibilidades de otra reelección.
«Los trabajadores tenemos que tener un espacio de representación y no podemos esperar que la política nos las regales. Podemos ser una alternativa, en búsqueda de una construcción amplia, que le llegue a la gente y que pueda lograr transforma Morón», indicó Martínez, posible referente electoral de este espacio naciente que se presentó en sociedad ayer, tras una reunión en la sede que ATSA tiene la calle Casullo al 200.
Cada uno de estos dirigentes (a los que se pueden sumar otros gremios, caso el de SUETRA), tiene distintos referentes nacionales, pero los mismos problemas en común: EOCA negocia la reincorporación de 70 trabajadores despedidos de la sucursal Laferrere de la cadena mayorista Medamax; UTHGRA lucha contra el plan de ajuste del Bingo Morón, que podría cerrar su restaurante; y ATSA busca que unos 80 ex empleados de la desaparecida Clínica Constituyentes sean tomados en la nueva Santa Clara (el sanatorio del grupo BASA que apenas si trasladó a su personal de su sede de Ramos Mejía, donde atendía a los de la UOM).
«Entre hoy y mañana el Gobierno tratará de firmar el acuerdo de mayo. Decidimos ser parte de un espacio en el que los acuerdos sean en base a la patria», sostuvo D’ Andrea, quien supo ser presidente del Consejo Justicialista de Morón. Para ser alternativa electoral, sabe que necesitarán del aval superior del partido.
La lapicera en Provincia la tiene Máximo Kirchner. Y en Morón Claudio Román, pariente del ex senador pero aliado del sabbatellismo (fue concejal y pasó por varios cargos: actualmente es secretario de Control Comunal).
«De las obstrucciones que hubo, en vez de sumar, restamos. Tuvimos menos participación. En los lugares donde se permitió la participación de la gente, se pudo elegir. Cuando fui presidente estuve a punto de ir a elecciones. No nos permitieron de Provincia. En 2016 armamos internas y es la mejor forma de revalidar títulos. Hay que democratizar los partidos. La política quiso ser dueña de la CGT. Después gana Milei y nos piden que salgamos a la calle. El primer golpe de este gobierno fue el paro general», apuntó el de Sanidad.
Y amplió: «La política no tiene que ser una pyme familiar. Nos estamos achicando. Y terminamos siempre en la misma discusión banal de tres o cuatro cafés de la Municipalidad, sin conocer la realidad de los vecinos».
Pintos agregó: «Morón pasó a ser una ciudad dormitorio. No sabemos si es un industrial, comercial, universitaria. Ya lo padecimos en gobierno liberales. Han cerrado fábricas como La Cantábrica en otras épocas. Debemos definir un Morón que nos contenga. Pretendemos un Morón limpio, con asfalto y calles en condiciones y con seguridad. Cuestiones que hoy faltan. Queremos mejorarle la calidad de vida de la gente».