19/05/2024

A un año de su muerte: Marchan por el nene que murió en la matinée del club El Porvenir de Castelar Norte

Familiares y amigos de Joaquín Centeno, el nene que falleció hace un año en la matinée del Club El Porvenir de Castelar Norte, marcharon este lunes desde la Municipalidad y hasta el edificio de la Fiscalía General de Morón para exigir avances en la investigación del caso: No creen haya sido consecuencia de una muerte súbita, como se dejó correr desde el establecimiento deportivo, sino de las condiciones del lugar.

«Joaquín no se ahogó con un chupetín. Joaquín no tuvo muerte súbita. Joaquín no tenía problemas cardíacos. Joaquín falleció de un paro cardíaco producto de un edema agudo de pulmón. Se sofocó con el humo de la máquina del dj dado que las condiciones no estaban dadas para que lo tire porque las puertas estaban cerradas ventanas también y el aire acondicionado no andaba», afirma su madre, Paula Insaurralde.

“El baile se realizó en la parte de atrás de El Porvenir, esa parte tiene 3 puertas. La de entrada, una que da a la parte de atrás y otra lateral, estás dos últimas estaban cerradas”, sostiene la querella. Y agrega: “El aire acondicionado no andaba, solo había un ventilador. Y otro que después le pusieron enfrente a mi hijo. El DJ tuvo que patear o romper una puerta para conseguirlo. La cantidad de nenes era impresionante».

La investigación está a cargo de la fiscal Valeria Courtade, de la UFI 3 de Morón, que ayer recibió a los padres.

Joaquín Román Centeno tenía 11 años y jugaba al fútbol en el Club 77 de Castelar. En la noche del viernes 11 de noviembre se descompuso en una matiné organizada por el club El Porvenir de la calle Curutchet al 2200. En ese momento, el nene fue asistido por las personas que estaban en el lugar y fue trasladado de urgencia al Hospital de Morón. Allí fue atendido por los médicos, pero no pudieron salvarle la vida.

Antes de la autopsia, se creía que el nene había muerto por ahogamiento, pero la autopsia determinó que fue una «muerte súbita».

Paula sostiene que nadie en el club sabía hacer maniobras de reanimación cardiopulmonar en el lugar y durante la crisis: “¿De esto tampoco se van a hacer cargo? Si hacés un evento así, por lo menos te tenés que asegurar de que dos personas estén ahí presentes sabiendo hacer RCP. Recién cuando lo sacamos a Joaquín afuera una mujer me dijo que trabaja en salud y que me quedara tranquila, pero ya era tarde”.

Cuando los efectivos policiales llegaron al lugar, la mujer remarcó que tampoco sabían qué hacer: “Creían que tenía algo en su garganta, pero no. Joaquín vomitó tras maniobras de desahogo que realizó un policía. La ambulancia nunca llegó. Lo llevamos en nuestro propio auto custodiados con la policía para poder llegar más rápido con mi amiga Sol, que se vino desde 40 cuadras para hacerle RCP, porque le avisaron que nadie sabía”.

“Joaquín estaba bailando en el escenario muy bajito con sus amigos. Una máquina tiró humo y su amigo tuvo que salir corriendo a una ventana porque se le nubló la vista y no pudo respirar. Cuando volvió, Joaquin ya estaba en el piso. Si ahí ocurría un incendio, hoy estaríamos llorando a muchos pibes y pibas, porque la única puerta que estaba abierta era la de entrada. El malón de niños que salía mientras yo quería ingresar no se los puedo explicar”, afirmó en un posteo que hizo en sus redes sociales.

Pese a que Paula criticó la organización del evento, pidió que no cierren el club: “Lejos estoy de que el club El Porvenir cierre, soy creyente que el club es el mejor lugar para los niños. Pero no se hagan los boludos y háganse cargo que hicieron todo mal”.

“Todo está en manos de la Justicia. Se verá como se sigue. Pero lo que si sé es que yo sigo, pero sin mi hijo. Gracias a todos, a sus dos clubes que eran su vida, y a sus amigos y amigas. A los nuestros, familia y gente del barrio. Todos amaban a mi negro. El que lo conoció sabe de lo que hablo”, añadió la mujer.