Castelar: Volvieron a vandalizar la Calesita de Don Atilio y piden más iluminación en Plaza Cumelén

La semana pasada la icónica calesita de Don Atilio fue vandalizada nuevamente por extraños, quienes rompieron las rejas que protegen las instalaciones, y la boletería, para llevarse una garrafa. Tras el último episodio, en enero, su dueño, de 83 años, había advertido que podía retirarse, lo que movilizó distintos resortes de la comunidad de Castelar.

La calesita de Atilio Escalón, lleva 53 años en la estación, pero los últimos 15 en la Plaza Cumelén (o el Vagón), donde fue trasladada tras la venta del terreno donde originalmente estuvo instalada. Entonces empezaron otros problemas.

«Lo primero que hicieron fue prenderla fuego, como para que viéramos cómo es la cosa. Lo último fue romper la reja de la boletería, nada más que para llevarse una garrafa. Estuve pidiendo un poco más de iluminación en la Plaza», relató el simpático comerciante a La Nación+. Sin embargo, esta vez no dio indicios de un final de ciclo (aún).

Tras aquel subsidio municipal para reponer las instalaciones, la subsistencia de ese carrusel y de la seguridad se volvió a instalar en la política municipal. «Presentamos con el concejal Francisco Mones Ruiz (CC-ARI) un proyecto al Concejo Deliberante para que la declaren bien patrimonial de interés histórico, social y cultural. Esto obligaría al municipio a asistir, preservar y proteger la calesita ante cualquier hecho que afecte su funcionamiento», recapituló Carlos Núñez, dirigente del GEN de Morón. El proyecto se trató y fue girado al Ejecutivo para ver su factibilidad.

«El primer lunes de enero me encontré con que habían roto la lona para entrar y defecaron arriba del asiento de un juego de la calesita. La verdad que fue un disgusto enorme, subió la presión», explicaba Atilio en sus redes, días después.

A finales de febrero, la calesita volvió a ser intrusada por la noche: rompieron las lonas que cubren el carrusel y destrozaron la pochoclera. Atilio se sentía «abandonado por quienes vandalizaron la calesita y por aquellos que deberían garantizar seguridad y protección». «Si no hacen nada por la seguridad, me voy», sentenció Atilio en su Facebook.

Por su parte, Mones Ruiz enfatiza que el problema de seguridad radica en el acceso peatonal que está pegado a las vías del Tren Sarmiento, detrás del vagón y detrás de la calesita. Lo que se pide es más iluminación en el parque lineal.