Caso Agustina Casco: Fiscalía General pidió acelerar investigación por la muerte de la joven policía
La Fiscalía General de Morón emplazó hoy a la titular de la UFI 4, Dra. Paula Salevsky, a culminar con la investigación en torno a la muerte de la policía bonaerense Agustina Casco (21), considerando pedidos de la querella tales como una pericia al teléfono celular de la víctima, declaración de testigos y un informe ginecológico, hasta tanto no se resuelva el cambio de jurisdicción departamental planteada por la propia fiscal.
La causa, caratulada como averiguación de muerte, pasó por cuatro fiscalías desde el 23 de noviembre, día en que la joven ituzainguense falleció en la clínica provincial de Merlo, producto de una hemorragia interna
La familia denuncia que habría presiones para no investigar el deceso, ocasionado a su entender por los golpes recibidos durante un entrenamiento en la Escuela de la Policía Bonaerense «Juan Vucetich», adonde Agustina hacía un curso para alcanzar el grado de «oficial». Los dolores la habían llevado, primero, al hospital del Bicentenario de Ituzaingó (PAMI), en donde la derivaron. Para la Justicia, todavía no hay sospecha firme de un homicidio culposo, pero tampoco adoptó las medidas para descartar esa hipótesis.
El 10 de junio, familiares de Agustina se volvieron a manifestar ante la Fiscalía de la calle Colón al 200 (Morón), después de que el Departamento Judicial de Quilmes rechazara el caso, teniendo en cuenta que está en jurisdicción de la Vucetich (Berazategui). A Salevsky le reclamaron «avances». Y, en parte, tenían razón.
En una nota firmada este martes 25, la fiscal general Adjunta, Ana Daniela Barrozo, se hizo cargo de las demandas de la querella. Si bien asegura en sus fundamentos que «no es cierto que la investigación no haya avanzado», reparó en los «obstáculos» que tuvieron los investigadores para recabar las historias clínicas y reconoció que falta de declaración a testigos y por lo menos una pericia al teléfono celular de Agustina.
La familia Casco ya difundió fotos que estaban en ese smartphone en el que ven los moretones que ella tenía en su cuerpo. Son parte de chats privados que no están en el expediente judicial, según afirman en su entorno. Como tampoco se incorporaron las compartidas por excompañeras de Agustina (ver fotos en Twitter).
La querella sigue a la espera también de un peritaje imparcial. «No nos dio respuestas certeras del estado de la causa. Tampoco preservaron el cuerpo de Agustina», comunicó la familia, tras la última reunión en la Fiscalía.
Ese encuentro en la Fiscalía General fue sólo con la madre, Claudia Pereyra. Hace un mes, la familia también difundió mensajes de otras mujeres que cursan en la escuela de la Policía y denunciaron malos tratos.
El tema llegó hasta la Secretaría de DDHH de Nación, que en mayo pidió un informe a la Justicia de Morón. El 14 de este mes se sumó una nota de la Dirección Nacional de Protección de Grupos en Situación de Vulnerabilidad, que depende del Ministerio de Seguridad, dirigida directamente a la UFI N° 4.
«Estamos cansados de que jueguen con el dolor y la vulnerabilidad de la familia que nos tomen el pelo, vamos a seguir luchando y pidiendo justicia las veces que sea necesaria necesitamos que la Fiscal haga su trabajo y la causa empiece a avanzar», rezan los familiares de Casco en la cuenta de Instagram que sigue el caso.
Agustina murió el 23 de noviembre en la Clínica de Merlo, una semana después de empezar su franco. Al llegar a su casa de Ituzaingó adujo un malestar general. El dolor se agudizó el sábado 18 de noviembre, por lo que la ayudante de suboficial fue llevada de urgencia al Hospital de Ituzaingó, donde le diagnosticaron un cuadro de “abdomen agudo, anemia aguda y líquido alojado en la cavidad abdominal”.
Allí quedó en observación, pero luego fue derivada al Hospital provincial. Claudia aseguró que a su hija “la dejaron morir” porque no le dieron asistencia médica después de la práctica de esposamiento a la que la sometieron.
“La Justicia solo se lavó las manos y nos patean la causa de un lado al otro. No se quieren hacer cargo”, se quejó.